Quizás si supiéramos desde el principio,
que las personas también se rompen y dejan de funcionar,
como el amor.
Si supiéramos que nadie es imprescindible,
que no hay confianza que se pueda firmar en un contrato,
ni fe ciega.
Si la eternidad se escapa,
si nadie la vio, si no existe,
¿por qué seguimos diciendo las mismas palabras impostadas,
si en realidad no decimos ninguna
que sea abarcable?
Quizás si amáramos al revés, si perdonáramos primero y conociéramos después,
tendríamos como única certeza a quién hemos querido,
olvidaríamos al dormir,
y no existiría el vacío
cuando se le quitan las pilas al juguete viejo,
para poder estrenar el juguete nuevo.
http://www.youtube.com/watch?v=DOQ3R3MNcv8
A vivir se aprende viviendo.
ResponderEliminarCon todo lo que conlleva.
grandísima la rusa !!!
ResponderEliminarsi supiéramos disfrutar y disfrutar nada más...
preciosa entrada! voy a seguir cotilleando, pero antes de despedirme quería invitarte a mi baúl, por si quieres compartir algún sueño con todos los amigos de Coquette.
ResponderEliminarte espero!
hasta pronto =)